La exposición 'Pedro de Mena. Granatensis malacate', reúne en el Palacio Episcopal 62 esculturas, bajo el comisariado de José Luis Romero. Tallas como el “San Francisco de Asís” de la Catedral de Toledo y la “Magdalena penitente” incluida en la colección del Museo del Prado y expuesta en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid figuran entre los principales reclamos de la muestra.
La exposición repasa facetas de la trayectoria de Pedro de Mena como las Inmaculadas, aquí podremos ver nueve de las trece tallas de esta temática que firmó, sus característicos Ecce Homos y Dolorosas y que al tiempo se asoma a la temática infantil en la producción del autor.
En palabras del coordinador del proyecto, Gonzalo Otalecu, quien ha reivindicado el montaje como la exposición que más obras de Pedro de Mena ha sido capaz de reunir hasta la fecha, “Nos vamos a reencontrar con un escultor único”. Además esta muestra ha servido para la restauración de 25 esculturas del autor que firmó su “Magdalena penitente” como “un granadino en Málaga”, al que alude el título de la muestra que coincide con el quinto aniversario de la recuperación para uso cultural del Palacio Episcopal.
Así, la exposición sobre Pedro de Mena se reivindica como “un hito cultural de la ciudad de Málaga”, ha mantenido Otalecu sobre el montaje que abrió sus puertas al público el 16 de marzo y permanecerá hasta el 14 de julio.
La exposición está estructurada en siete secciones, seis en el Palacio Episcopal y una en la Catedral de Málaga, que incluye la sillería del coro, en la que el escultor hizo inicialmente 40 autorrelieves entre 1658 y 1660, y añadió dos más, "San Blas" y "San Julián", por encargo de fray Alonso de Santo Tomás.
El proyecto que se ve completado con la nueva iluminación de la sillería del coro de la Catedral, obra que el artista llevó a cabo en dos años, y que en palabras del comisario: “Mena no vino sólo a hacer un coro, sino que vino a liberarse de la presión artística de Alonso Cano. Durante dos años fue evolucionando desde la influencia de Cano hasta su propio estilo, marcado por el naturalismo”.
Un artista que en los últimos años ha ingresado en colecciones como las de The Metropolitan Museum de Nueva York y el Museo de San Diego.